Los familiares de Guadalupe Belén Lucero y varios militantes de organizaciones sociales se movilizaron en el microcentro de San Luis para exigir la aparición con vida de la niña, tras cumplirse dos años sin noticias de ella. “Viva se la llevaron, viva la queremos”, fue una de las consignas que los manifestantes gritaron frente a los juzgados federales que llevan adelante la investigación.
Desde las 17 horas del miércoles, cientos de personas se reunieron en el centro cultural La Vía para marchar por las calles de la capital puntana hasta la esquina del Correo Argentino, en donde se concentraron para leer un comunicado en repudio por la falta de respuestas y los pocos avances que tuvo la causa. Finalmente, la jornada se cerró con una intervención artística llamada “Música y poesía por Guadalupe”, en honor a la pequeña.
“Han pasado dos años desde su desaparición y no ha habido ningún avance. Rompan el pacto de silencio, alguien tiene que hablar”, reclamó la abuela de la nena, Silvia Domínguez, quien agradeció a las personas que acompañaron a la familia desde que comenzó la búsqueda de la infante que desapareció el 14 de junio de 2021, cuando jugaba con sus primos en el frente de su domicilio ubicado en el barrio 544 Viviendas.
De acuerdo con la información a la que accedió Télam, Domínguez aseguró que “lo único que nos queda es unirnos, hacernos visibles, organizarnos, denunciar y salir a la calle” luego de manifestar que ninguna niña desaparece de su casa porque sí. “Se la llevaron con vida y con vida la queremos de vuelta”, exigió la familiar de la pequeña ausente.
“No perdí las esperanzas, hoy también la tengo, la voy a seguir teniendo de encontrar a mi hija y tenerla conmigo es algo que nunca se va”, reforzó el padre de Guadalupe, Eric Lucero, en una marcha con el mismo recorrido que se realizó durante la mañana.
En ambas movilizaciones, los manifestantes llevaron al frente una bandera de arrastre con la fotografía de la niña junto a la frase: “¿Dónde está Guadalupe? ¡Devuélvanla ya!”. Asimismo, varios portaron imágenes de la pequeña y carteles impresos con la consigna “2 años sin Guadalupe”. Entre ellos, el gobernador electo, Claudio Poggi, caminó unas cuadras en la fila junto a su equipo, hasta que los participantes le pidieron que se retirara.
Hasta el momento, la investigación a cargo del fiscal federal Cristian Rachid recibió 30 denuncias telefónicas vinculadas a la desaparición de la pequeña, se hizo una actualización de la foto de la búsqueda por pedido de los familiares y se logró determinar que la nena desapareció entre las 19 y las 19:05 horas, es decir, entre 22 y 27 minutos de diferencia con la llamada que la familia efectuó al 911 para informar sobre lo acontecido.
A pesar de que no existe ningún detenido por el caso de Guadalupe Lucero, Rachid mencionó que “una mujer vestida de negro y con capucha” fue la última persona ajena a la familia que estuvo en el perímetro en el momento que desapareció, por lo que el funcionario público explicó que esto “permitió inferir que esta mujer podría haber tenido alguna injerencia en el hecho”. Sin embargo, no se pudo identificar a quién sería la única sospechosa.
A lo largo del proceso de búsqueda, se rastrillaron 1.500 sectores, entre ellos, el predio del barrio 544 Viviendas y la autopista Serranías Puntanas de la ciudad de San Luis, para descartar que la nena hubiera sido víctima de algún accidente vial, cuando jugaba en la calle con otros chicos. Además, los Bomberos de la Policía y la Prefectura Naval Argentina buscaron en 18 lagos y perilagos del distrito con el apoyo de perros, georradares y un vehículo por control remoto que es apto para ser sumergido en el agua.
El fiscal precisó que se realizaron 465 allanamientos en Mendoza, Córdoba, Neuquén, Río Negro, La Pampa y Salta; y se tomaron 900 declaraciones, en donde varias de ellas resultaron ser falsas como, por ejemplo, el testimonio de un joven que se incriminó al reportar que el cuerpo se encontraba en una zona serrana de Potrero de los Funes durante junio del año pasado.
Por otro lado, la Dirección de Asistencia Judicial de Delitos Complejos colaboró en el secuestro y peritaje de más de 100 celulares, otros 150 dispositivos electrónicos portátiles y el análisis de tres mil horas de filmación recopiladas de 113 cámaras de seguridad que se encontraban en la zona de la que desapareció Guadalupe.