Por: Oriana Godoy

Cada 19 de octubre, por iniciativa de la Organización Mundial de la Salud, se celebra el Día Internacional de la Lucha Contra el Cáncer de Mama, con el objetivo de crear conciencia en toda la sociedad y aumentar las medidas de prevención, la detección temprana, y el acceso a diagnósticos y tratamientos oportunos y efectivos.

En Argentina, el cáncer de mama es el cáncer de mayor incidencia en mujeres. Se estima que 1 de cada 8 mujeres puede tener esta enfermedad. Pero, otro dato y no menos importante, es que para el cáncer de mama la detección temprana es fundamental, ya que los tumores de menos de 1 centímetro tienen hasta el 90% de probabilidades de curación. Es decir que, es posible salir de esta enfermedad; y Gabriela Ferresin es testigo de ello.

Gabriela Ferresin, tiene 59 años, es de la provincia de Córdoba y es madre de 2 hijos. Se recibió de Licenciada en Bioquímica en la Universidad Nacional de San Luis y de Doctora en Bioquímica. Actualmente es docente en la Universidad Nacional de San Juan, y también es Investigadora Principal en el CONICET.

A finales de 2019, en el mes de diciembre específicamente, Gabriela sintió una leve punzada en su mama derecha. Un mes después, se palpaba algo pequeño, como una lenteja. Este fue el motivo por el que decidió pedir turno, con su doctor de siempre, en el IMGO (Instituto Modelo de Ginecología y Obstetricia de Córdoba). Así, el 11 de febrero de 2020, le realizaron una mamografía y una ecografía mamaria con doppler; en ambos diagnósticos vieron algo sospechoso.

Al día siguiente Gabriela fue a realizarse una punción-biopsia, solo quedaba esperar el resultado. Ella presentía que era algo malo. El 2 de marzo de ese mismo año, el médico llamó a Gabriela para decirle que los resultados mostraron que el diagnóstico era cáncer ductal invasivo. Este es el tipo más común de cáncer de mama. Además de sentir miedo y angustia, lo primero que pensó Gabriela fue: “hay que actuar rápido”.

Todo lo necesario para la cirugía se realizó de inmediato. El 9 de marzo Gabriela fue operada, le realizaron una cuadrantectomía, una operación para quitar solamente el tejido mamario anormal. Tiempo después, a Gabriela le informaron que las células cancerígenas que tenía eran de tipo HER2+, caracterizadas por propagarse o hacer metástasis de forma más rápida hacia otras partes del cuerpo.

Posteriormente, Gabriela buscó un médico oncólogo en San Juan, ya que ella trabaja como docente en la provincia. Lo primero: le dijo que el tumor ya no estaba y que se actuó a tiempo. Esto es fundamental y por eso es uno de los mensajes de toda campaña de concientización y lucha contra el cáncer de mama. Al respecto, Gabriela comentó que es muy importante que las mujeres se realicen los controles anualmente, y ante cualquier duda o sensación rara deben buscar ayuda, consultar a profesionales y realizarse los estudios correspondientes.

A Gabriela su médico le indicó 8 sesiones de quimioterapia, desde abril a septiembre de 2020; en octubre y noviembre realizó 26 sesiones de radioterapia; y por un año recibió inmunoterapia. Finalizó todo el tratamiento en julio de 2021. Gabriela cuenta que se realiza controles exhaustivos cada seis meses, y que hoy en día, está muy bien.

Todos los años, el mes de octubre se tiñe de rosa: en las calles, en las redes, en las plazas, en las instituciones, en los hospitales. La importancia de que todas las mujeres que tienen a partir de 25 años se realicen controles es porque estar atenta y conocer tu cuerpo te salva. Hoy más que nunca, prevenir es detección temprana.