En 2015, fue condenado a perpetua por el femicidio de Ángeles Rawson. El Gobierno busca tomar muestras de más de 22 mil abusadores sexuales con sentencia firme en todo el país.
Jorge Mangeri, condenado a cadena perpetua en 2015 por el femicidio de Ángeles Rawson, se negó a entregar su ADN al Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a Delitos contra la Integridad sexual (RNDG). A través de su reglamentación el 17 de julio de 2017, el Gobierno busca tomar las muestras de ADN de más de 22 mil abusadores sexuales con sentencia firme en todo el país. La recolección se realiza a través de hisopados bucales y podría facilitar el esclarecimiento de delitos contra la integridad sexual.
Mangeri, preso en el penal de Ezeiza luego de haber sido condenado por el Tribunal Oral Criminal N°9, ocupa una de las primeras posiciones en el listado del RNDG. Sin embargo, personal del programa informó que el femicida, que en el pasado había autorizado la extracción de su muestra, se negó a hacerlo.
A través de una desafiante frase consignada en un acta, el asesino de Ángeles sostuvo: “Pedí desde hace cinco años este estudio y la Justicia siempre me lo negó. Ahora no acepto yo”.
Ante lo sucedido, las autoridades del programa solicitaron a la justicia la muestra de ADN de Mangeri tomada durante el caso, la cual se encuentra bajo supervisión del Cuerpo Médico Forense. El genetista Jorge Dotto, director del Registro, ya presentó dos oficios al Tribunal Oral Criminal N°9 con el requerimiento.
Fuentes del RNDG aseguraron que, hasta el momento, no hubo una respuesta del Tribunal que condenó al portero. “Le solicitamos al juez la toma de la muestra en cumplimiento de la ley”, explicó Dotto. “Es una política de Estado para darle una respuesta a la sociedad y a las familias de las víctimas”, remató.
El femicidio de Ángeles
La mañana del lunes de 10 de junio de 2013, Ángeles Rawson, de 16 años, fue vista por última vez por sus amigas. “Voy a comer y vuelvo”, les dijo, y ya nunca regresó a su casa. Al desconocer su paradero, la familia radicó la denuncia y se abrió una investigación para encontrarla. Finalmente, el cuerpo de la joven fue hallado en el Complejo Ambiental Norte III de Ceamse, oculto en bolsas de consorcio en el interior de un contenedor. Según las pericias, la adolescente murió por estrangulamiento y sofocación.
Los investigadores apuntaron contra el portero del edifico, Jorge Mangeri, quien, en un principio, confesó haber sido el autor del crimen, pero que más tarde se negó a declarar. Una de las evidencias que sirvió para condenarlo fue la muestra de ADNextraída debajo de las uñas de la víctima.
Según el fallo firmado por los jueces del Tribunal Oral 9, Fernando Ramírez, Ana Dieta de Herrero y Jorge Gettas, Mangeri buscó “satisfacer sus deseos”. Para los camaristas que lo condenaron a prisión perpetua, el portero usó el cuerpo de la víctima y luego lo descartó. Se trató del primer juicio en el se aplicó la figura de femicidio y el acusado recibió la pena máxima.
