En un contexto donde las adversidades se convertieron en motor de cambio, María Muñoz, una emprendedora de 60 años de Santa Lucía, demostró que la innovación y la sostenibilidad pueden nacer incluso en los momentos más difíciles. Su emprendimiento, que comenzó en 2021 en plena pandemia, se consolidó como un referente del aprovechamiento de residuos textiles, llevándola a ser reconocida como la primera Emprendedora del Sol en la Fiesta Nacional del Sol 2024.
Junto a su hija, María creaó un proyecto que transforma desechos de la industria textil en paños industriales, que luego son vendidos a talleres metalúrgicos. Pero su labor no se detiene ahí; ambas han desarrollado una línea de productos ecológicos que incluye coleros, moños y ropa para mascotas, todo fabricado a partir de los residuos generados en su proceso de producción. Esta iniciativa no solo contribuye a la economía circular, sino que también promueve la conciencia ambiental y el uso responsable de los recursos.
El impulso para participar en la Fiesta Nacional del Sol vino de su hija, quien vio en su madre no solo una empresaria, sino una pionera en el emprendimiento sostenible. María, inspirada por la necesidad de dar un nuevo uso a materiales que de otro modo terminarían como basura, logró establecer un modelo de negocio creativo y sustentable que desafía las normas tradicionales.
El reconocimiento de María Muñoz no solo destaca su labor individual, sino que también subraya la importancia de visibilizar a las mujeres en el ámbito del emprendimiento. Su historia es un ejemplo del potencial transformador que tienen las mujeres en la economía local, especialmente en un contexto donde la sostenibilidad y la innovación son más necesarias que nunca.
