El frío y la brisa del sur del sábado 22 de julio fueron oportunos para que la segunda Feria de la Semita, en Capital sea todo un éxito. Al salón del Museo de la Historia Urbana, ubicado al costado norte del Parque de Mayo llegaron más de 15 expositores, la gran mayoría mujeres que lograron exponer sus productores artesanales y que en menos de dos horas vendieron el amasado.
Hilda Díaz, fue una de las panaderas artesanales que llegó al MHU y mientras estaba acompañada por una de sus hijas y vendía las más de 340 semitas, contó que gracias a este producto típico de San Juan logró acompañar a sus hijas en los estudios.
En dialogo con 911mujer, Hilda contó que hacía 10 años que no amasaba y que aprovechó el Club de la Semita para ser parte de un evento cultural que dejó a todos felices. La panadera recordó que por muchos años vendió semitas en la esquina de avenida Rawson y San Lorenzo, en Concepción y que gracias a ese emprendimiento pudo darles una vida bonita a sus hijas.
Hoy me encontré a personas que me compraban hacen muchos años y me reconocieron acá. Estoy feliz por estar en el club
Hilda junto a su hija, quien ya se encuentra trabajando en la Policía de San Juan enfatizó que vender semitas fue muy importante para la economía de su hogar. “Vendiendo logré que mis hijas estudien y pudimos vivir tranquilamente y eso me impulsó a comprar ropa en Buenos Aires y así y poder salir de vacaciones y tener una vida bonita”, destacó la mujer que en pocas horas vendió las 340 semitas que había elaborado horas antes.
En cuanto a la clave para lograr una sabrosa semita, dijo que es fundamental el amasado. Además, dejó unos tips para quienes amasan: “Es importante que la grasa y el chicharrón sean frescos y no estén congelados y deben ser cocinados a fuego lento”.
“Una buena semita lleva horas de trabajo”, finalizó.
La historia de Hilda nos enseña que el talento y la dedicación pueden abrir oportunidades para el empoderamiento de las mujeres y el bienestar de sus familias. Su valioso emprendimiento en la panadería no solo les permitió estudiar a sus hijas, sino que también les brindó una vida digna. La historia de Hilda es un ejemplo inspirador de cómo las mujeres pueden superar desafíos y lograr el éxito en el ámbito laboral y personal.
El club de la semita
La primera presentación del Club de la Semita fue en el marco de los festejos por un nuevo aniversario de la Fundación de San Juan, creado con el objetivo de generar vínculos entre productores y la comunidad. A partir de aquella convocatoria y gracias a la difusión en redes sociales, se debate sobre declarar la Semita Patrimonio Provincial.
Este Club de la Semita procura poner en escena eso que nos identifica tanto a los sanjuaninos como son las semitas caseras. Para ello se citó a semiteros populares y maestros panaderos a que participen y sean parte del evento, donde se mostrará, compartirá y venderá los diferentes productos y derivados de la semita. Para degustar estos riquísimos productos, se podrá probar distintas variedades: semitas tradicionales con chicharrones, Sit Tacc y veganas. El evento que reúne a los productores permite que compartan oportunamente historias familiares y detalles propios de sus elaboraciones, para conocer todo lo que hay detrás de este proceso de producción tradicional.