Un grave episodio de violencia de género ocurrió horas atrás, cuando una mujer llegó hasta un lubricentro para pedirle a su expareja que la deje de molestar. Pero, fue encerrada en un baño para ser ferozmente golpeada.
Según fuentes judiciales, la víctima llegó hasta el taller ubicado en el barrio Aramburu con intenciones de hablar con su exnovio y decirle que cese con el maltrato, pero de un momento a otro la agarró por la fuerza y la introdujo en un baño para someterla a golpes y culparla de haber perdido un trabajo en la Policía Federal.
Mientras la sometía a golpes de puño, la tomó del cuello y la amenazó con pegarle con un fierro. Mientras amagaba con el objeto metálico en la mano, la mujer pedía ayuda. Sus gritos fueron escuchados por personal de la Comisaría 27° que se encuentra justo enfrente del lubricentro e interrumpieron en el taller para detener al sujeto.
“Carlos Famar la tenía agarrada del cuello y por tal motivo personal policial procedió a su aprehensión. Dadas estás circunstancias se pone en conocimiento al ayudante fiscal en turno quien se hace presente en el lugar del hecho e imparte las directivas y se da comienzo al procedimiento especial de flagrancia”, expresó el parte de la UFI de CAVIG. Después de que Famar fue trasladado a la comisaría, la mujer fue acompañada hasta la sede de CAVIG donde fue abordada por personal que la acompañó a realizar la denuncia mientras el médico legista comprobó las lesiones que surgieron en diferentes partes del cuerpo.